Armando Fuentes “Catón”
![]() |
(con excepción, aclara, de los años bisiestos, en los que escribe 366 días).
Su labor periodística se extiende a más de 150 diarios mexicanos, entre ellos El Reforma, El Norte y Mural, donde publica sus columnas “Mirador” y “De política y cosas peores”.
Dijo un individuo: -Ojalá Beatriz Paredes o Alejandra Barrales lleguen al gobierno del Distrito Federal, y Josefina Vázquez Mota a la presidencia de la República.
Un amigo del tipo se sorprendió al oír aquello, pues el sujeto profesaba anacrónicas ideas machistas. Le preguntó:
-¿Por qué deseas que lleguen mujeres a
esos cargos?
Contestó el otro:
-Porque así podremos pagarles menos.
El cuentecillo no tiene gracia alguna
si se considera que en muchos casos, en efecto, las mujeres trabajan el doble
que los hombres y ganan la mitad que ellos. Prevalece aún en nuestra sociedad,
reconozcámoslo o no, una actitud de discriminación a la mujer que todos debemos
esforzarnos en suprimir.
Yo celebro que haya un Día de la Mujer,
pero celebraré más cuando ya no lo haya. Si esa celebración existe es como
recordatorio de las injusticias que las mujeres sufren, de las violencias de
todo orden de que son objeto, de la posición de inferioridad en que el varón
las tiene todavía en muchos países de la Tierra. Estremece ver la forma en que
en algunas sociedades la mujer es tratada desde que es niña hasta su muerte.
Obsoletas concepciones religiosas y sociales siguen haciendo que las mujeres
sufran maltratos y sean privadas de derechos básicos. Nuestro país no es ajeno
a esa situación: los llamados “usos y costumbres” de algunas comunidades
indígenas incluyen esos abusos contra la mujer, y la violencia doméstica de
género puede encontrarse en todos los estratos de la sociedad.
Yo he tenido siempre la certidumbre de
que la mujer es superior al hombre. No lo digo por adulación, sino por
convencimiento. Ella es el verdadero sexo fuerte. A Winston Churchill le
preguntó en cierta ocasión un reportero:
-¿Qué piensa usted, sir Winston, de la
afirmación según la cual la mujer dominará en el siglo veintiuno?
Con simulado asombró preguntó Sir
Winston:
-¿También en ese siglo?
Yo de mí sé decir que de no ser por mi
mujer andaría dando tumbos por la vida. Ella me lleva por el mundo como se
lleva a un niño que no acierta a saber por dónde ir. Y no me avergüenza
decirlo. Compadezco al pobre hombre que no sepa escuchar el consejo de su
esposa. Las mujeres, se ha dicho siempre, tienen un sexto sentido que a los
hombres nos falta, pues muchos carecemos hasta del sentido común.
Sirva el Día de la Mujer para mostrar
nuestro cariño a todas las mujeres que nos rodean, y que con su presencia hacen
que nuestra vida sea mejor. Y si alguien nos pregunta quién manda en nuestra
casa respondamos:
Mi esposa decide las cuestiones
intrascendentes: dónde debo trabajar, cuánto debo ganar, a dónde iremos en las
vacaciones, etcétera. Y yo tengo la última palabra sobre las cuestiones que
verdaderamente importan: si los americanos deben dejar Guantánamo; si Irán debe
renunciar a las armas nucleares…
En efecto: si los hombres
queremos que las cosas vayan bien, dejemos ya que las mujeres manden. Se los
dice su afectísimo, atento y muy seguro mandilón.
Gracias por acordarse de nosotras las las mujeres pues es cierto el pilar fuerte de la familia son las mujeres y sin nosotras se debilitaría, pero lo mas importante es poder compensar con mucho amor no cobramos con dinero. millones de felicitaciones
ResponderEliminarpor supuesto que si,sin las mujeres no seriamos nada. y mas aun: un reconocimiento mayor a tantas mujeres que trabajan para ayudar en la economia del hogar,y todavia tienen que cumplir con sus obligaciones como madres y esposas.SII, QUE TODOS LOS DIAS SEAN DIAS DE LA MUJER!!!
ResponderEliminar